Buscando en el Internet .. me encentro este escrito... me hizo reflexionar .. todo en la vida .. en cualquier aspecto se reduce a las pequeñas cosas....
Las pequeñas cosas
por Diego
Esto fue hace muchos años atrás. Unos 8 meses antes de la
gran ruptura. ¿Ese día? ¿El día que pintamos el living juntos? Ese día fue
bastante tranquilo. Pintamos el living de mis padres por $50 y una pizza. Eso
era todo. Creo que vimos “Anchorman” o algo así después.
Pero todavía se mentiene como uno de mis recuerdos más
indelebles. No me malinterpreten, no sigo enamorado; sucedió, fue bueno,
terminó, y ambos seguimos adelante. Pero nunca voy a olvidar ese día. Porque,
al largo plazo, no se trata de los grandes gestos. Puedes volar alrededor del
mundo y aparecer frente a su puerta con una rosa en los dientes y un anillo en
una pequeña caja de terciopelo, pero te garantizo una cosa – casi siempre –
ella recordará ese momento que construiste la casa para pájaros en el patio, o
cualquier otra cosa, mucho más.
La vida no está destinada a ser vivida de grandes gestos. El
día siguiente inevitablemente llegará, te irás a dormir y el momento habrá
pasado. Pero cuando tiene cientos de miles de pequeños momentos, puedes mirar
para atrás y apreciar la escena mucho más que metafóricamente aguantar por un
gran momento, porque seamos honestos, no eres Bruce Springsteen, no vas a poder
volver loco a todo el mundo todas las noches. No eres Romeo y/o Julieta. No hay
razón alguna para beber el veneno juntos en un gran gesto de amor. Entonces eso
nos deja con las pequeñas cosas. Todo radica en los detalles.
Eso es el amor. Atención a los detalles.
Y el momento terminará. Y las cosas se pondrán aburridas. Y
puede que se vuelva algo calmado. Y puede que todo termine de manera horrible.
Y puede que finalmente terminen odiándose. Y puede que terminen distanciándose
y no vuelvan a hablarse. Pero así son las cosas.
Pero ella va a recordad aquella ocasión en que le abriste la
puerta en la primera cita.
Ella va a recordad cuando te reíste de su imitación de la
casera.
Ella va a recordar la primera vez que pasaron toda la noche
despiertos.
Ella va a recordar las pequeñas cosas mucho más que los
grandes gestos.
Pero todo termina. Y te voy a decir porque tienes que hacer
pequeñas cosas, los pequeños momentos valen mucho más.
Un día, probablemente mucho más adelante que hoy, cuando la
vejez ya haya llegado, ella probablemente sólo recordará tu sonrisa. Todo lo
que hicieron juntos, cada segundo, cada momento, cada latido, cada mañana que
pasaron en la cama, cada tarde que pasaron en el sofá, todo eso – se irá. Todo
lo que hiciste alguna vez se reducirá a la punta de un alfiler. Ella no
recordará tu nombre. Ella sólo recordará tu sonrisa, y va a sonreír. No sabrá
por qué. Es un hecho, una reacción. Pero ella va a sonreír, incontrolablemente,
y vendrá desde tan profundo del alma como para saber que llegaste a ella a un
nivle tan primario, honesto y verdadero que ningún científico, académico o
erudito podrá explicártelo. No hay nada más. No quedará nada más. Simplemente
esto: Ella recordará tu sonrisa, y sonreirá.
¿Y sabes qué? Eso es todo lo que realmente importa al final.